Google+ Raúl Acosta: Kristina y dos más

martes, 4 de octubre de 2011

Kristina y dos más

Las próximas elecciones definen Argentina por 4 años. Debido a la particularidad del país, exageradamente presidencialista, acaso por más tiempo. Como ejemplo debe pensarse que aún siguen los coletazos de los primeros tres años de Néstor Kirchner. La fuerza inercial es la impronta del político desaparecido.


Argentina no tiene muchas variantes. En algunos casos solo matices. Diferenciales, pero matices. Hay tres propuestas en marcha. Sólo tres.

La propuesta de la viuda de Kirchner se finca en su existencia. Es la titular del Ejecutivo Nacional. Presidenta en ejercicio. Todo lo que dice y hace es su campaña para las elecciones. Imposible evitarlo.

La propuesta de Hermes Binner puede describirse en iguales términos. Tiene su epicentro en la gestión ejecutiva provincial. La mayor dificultad de Binner es la escala. Todo lo que dice y hace en la provincia es su campaña. En el plano nacional el escollo es el desconocimiento. Nota: todas las poblaciones cercanas a Rosario y/o Santa Fe, pertenecientes a otras provincias, registraron un índice de preferencia por Binner que es importante indicar. Inesperado. Superior. Córdoba. Entre Ríos. Buenos Aires, en poblaciones con información de Rosario en primer término, y de la provincia después, votaron al Frente Amplio Progresista más de lo esperado por los estrategas de la campaña del gobernador santafesino.

La propuesta de Rodríguez Saá tiene el mismo punto de partida. Comienza desde la gestión provincial (convengamos: eterna, hereditaria, sospechosa). El caso San Luis tiene un flanco singular. No se encuentran testimonios de puntanos o sanluiseños (no hay reglas ortográficas para los gentilicios) que enfrenten a Rodríguez Saá. Como no había de Santacruceños en oposición al núcleo familiar K. No los había ni los hay, pública y periodísticamente. En el ostracismo si.

A CFK y a Binner el deporte nacional es denunciarlos. Al caudillismo no. Rara cuestión.

La influencia nacional de la viuda de Kirchner está centrada en el presupuesto y el uso indiscriminado de la chequera oficial. Corrección: altamente discriminado. Sin ningún contralor.

La presencia de Rodríguez Sáa es definitivamente mediática, espectacular. Glamorosa. Contradictoria.

El eje de Binner sigue siendo el mismo que ofertó en la ciudad y la provincia. Gota a gota. Con los años aprendieron que se puede. Con el tiempo se sabe que no es un “Bing- Bang” el racionalismo político.

El socialismo, el Frente Amplio y Progresista, propone la acentuación del Estado, de un Estado transparente y previsible.

Binner se oferta, dejemos a la señora Morandini fuera de estas apreciaciones, del mismo modo que Boudou es distinto a la viuda y no será quien junte voluntades.

Rodríguez Saá exhibe, como su logro, un estado paternalista y condescendiente con los hijos pródigos. Exhibe una población animosa y obediente. Excesivamente obediente. También una provincia claramente organizada.

La viuda propone continuar lo que está haciendo. Los otros dos extender lo hecho en su territorio.

El Estado es muy importante, es el eje las tres propuestas políticas serias para las elecciones cercanas.

No seduce Binner con expresiones altisonantes. La serenidad es su rasgo distintivo. No es el caso de la señora ni del puntano.

Los partidarios de Duhalde, como Rodolfo Vacchiano, candidato a diputado nacional peronista, “duhaldista”, por Santa Fe, deben sortear muchos obstáculos cuando les preguntan qué peronismo y qué fórmula. Das Neves no puede presentarse seriamente en lado alguno.

Alfonsín es la memoria familiar. Difícil transferencia. El radicalismo, ya fue dicho, no tiene vida.

Los que quieren votar a “Pablito” Javkin, por afecto al rosarino omiten preguntarle por su referente nacional. ¿Qué se puede decir, hoy, de Elisa Carrió? La valkiria de las tempestades se convirtió en una lluvia ácida sobre el panorama político nacional. La Carrió es el mejor ejemplo que los personalismos son eso: arrestos personales que agreden al ideario colectivo. Pablo Javkin, cuando el tema deriva a las relaciones nacionales, sonríe. ¿Qué mas? Acomodar el cuerpo a un jefe imposible que no será, jamás, Hannah Arendt.

José Saúl Wermus, conocido como Altamira, es una buena muestra de la tranquilidad que da la lejanía del poder. Está autorizado a decir lo que se le antoje. Es el mejor artículo en la vidriera, se exhibe, pero no hay obligación de compra.

El panorama es claro. Hasta hoy es muy visible la fortaleza K, del mismo modo que los dos proyectos con eje en una provincia se imponen al resto.

Un hecho llamativo es que muchos “chinos” (los izquierdistas más exaltados) apoyan a Rodríguez Saá. Hermes Binner, la mansa progresión hacia un Estado eficiente, molesta a los más radicalizados. Como también resulta un indicador asombroso de la realidad la inexistencia de un discurso “Midachi Macri”. Cuidado, el olvido intenta ganarle al árbol y al bosque. Recordemos. Fue el discurso antipolítico que hizo tambalear al socialismo, en Santa Fe, en julio pasado. Tres puntos separaron lágrimas y sonrisas. Mauricio Macri mostró similar fortaleza en Ciudad Autónoma, la ciudad del asco de Fito Páez. Hoy no están. En oktubre no estarán. Pero existen. Un destrabalenguas nacional.¿Derechas e izquierdas?¿Si? No. Rotundamente no. Izquierdas no.

El peronismo que aún no adhirió a la viuda y su corte está a punto de entrar a Balcarce 50 (a Olivos no, ese es un refugio privado) Cuando todo el peronismo con votos entre a la Casa Rosada comenzará la diáspora. Es de manual.

La posibilidad de leer a la sociedad en su verdadera encuesta ahora, el 23 de oktubre, es posible, posible y necesaria.

Con las elecciones sobrevendrá el hable ahora o calle para siempre. Hablemos. No se advierte una sociedad que se escape de la poderosa presencia estatal.

El discurso (equívoco y persistente) de castigar al liberalismo, al neo liberalismo, al “estado liberal” está dando frutos en una zona que parecía fundamental y lo era. Lo es. Se declama: el Estado no quiere ser liberal.

La República Argentina se refugia, con estos tres candidatos, en el Estado. Marca su contrato con la sociedad. El Estado me cuida, me da abrigo, crédito, me contiene, me habla. Mensaje. Básicamente un mensaje. Tal vez falte. La canción está. Los muchachos estatistas, todos unidos triunfaremos.

Cada día el país se despierta esperando el mensaje, el relato. Ya no somos. Cuentan como somos y aceptamos lo que nos cuentan. Tarea cumplida. La realidad es un invento utilitario que se anuncia a las 8 de la mañana.

La viuda, los Rodríguez Saá, como Binner son parecidos y diferentes. El modo en que acomodan sus discursos a la política mediática no es similar. Identificados por la paranoia persistente en un caso, porque saben que son motivo de una chacota silenciosa en otro, el tercero acepta las coordenadas, espacio y tiempo.

Se confiesan estatistas, el mismo Estado, parecido y diferente. Acaso no alcance. El bolsillo de hoy, la paternidad de ayer, la propuesta a mediano plazo definen oktubre. Mas claro: definen 4 años. Los definen Kristina y dos mas.

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