Boletos, pases y abonos

(Publicado en diario La Capital, miércoles 05 de febrero de 2014)

Fecha: 1960. El guarda del tren suburbano pasaba con su letanía: "boletos, pases y abonos"... Rosario ya era una región. Aún hoy se empecinan en negarlo (los políticos) por miedo a tener que trabajar a distancia. Hacia el mañana, sin coyuntura que apriete y que salve. Sin excusas coyunturales. Se niegan. Rosario era/ es una región y cada vez resulta mas inapropiado esquivar el asunto.


Los trenes suburbanos a Casilda, a Cañada de Gómez, a Las Rosas, a Morteros, los trenes mitad cargueros mitad pasajeros a Córdoba y a Santiago/La Banda poblaban la ciudad, entorpecían, enlentecían Cruce Alberdi (la salida del FFCC Mitre desde el centro de la ciudad) Los guardas seguían con el cantito: "boletos, pases y abonos". Eso había, boleto diario, pases estudiantiles y de obreros y abonos mensuales. El tren era un servicio y la vida se programaba de ida y vuelta con los trenes. Viceversa. Los trenes estaban programados para servir a la región. Insistencia persuasiva: Rosario Región. Termínenla con la distracción.

Se resuelve como Región o no se resuelve nada.

El bar de los gallegos en el Cruce, "Castaño Hermanos", aquellos asturianos altivos, lo demolieron de su ubicación junto al cabín 5, en Cruce Alberdi. A pala mecánica directa lo obligaron a cruzarse hasta más allá de la calle, ensanchada al tránsito. El intendente era un guapo que pensaba en 30/40 y 50 años vista. "El cementerio va a quedar en el centro, hay que hacer otro". "No habrá baldíos del centro a Barrio Cura"… "Los tranvías joden en mitad de las calles"… "Con calles mas anchas, menos puteadas por el tránsito". No era un urbanista, acaso hubiese sido necesario alguien que lo puliera, un equipo, pero miraba 50 años por delante. Sabía que prevenir era curar y que no le gustaba a muchos, pero no tenía miedo. Lo hacía. Coraje administrativo y mirada creativa. Capacidad. Riñones. Cuando vendían un terreno en barrios alejados del centro aseguraban: "Por la esquina pasa el 225"… La ciudad se armaba según sus líneas de transporte. Eran un seguro de crecimiento y comunicación. Pronto pasará el pavimento, haremos la cooperativa para traer el gas. Su terreno en 50 cuotas. Bestial y sencillo: había una programación, una proyección, un proyecto de ciudad. Había.

Entre "Apeadero Blas Bargas" y Funes los terrenos era puro salitre. Un clavo para cualquier cultivo. Hoy son barrios cerrados de alto costo. Desde el tren se los veía. Sin el transporte nada hubiese sido posible. Había tambos en Funes. Funes es el ejemplo de integración. Era una porquería, una verdadera calamidad la primitiva línea "L" de colectivos. Años pidiendo que la dejasen extenderse hasta Carcarañá. Años mendigando en la ciudad de Santa Fe un permiso que le negaban los burócratas y los coimeros. Todo estaba de antes. Burocracia y coima. Como se sabe. Je. No podía vender boletos urbanos.

Las disputas entre taxis y remises de Rosario y de esa zona oscura e inexplicable, el comienzo de VGG , Villa Gobernador Gálvez, desnudan el paso corto y la mirada hasta la punta de la nariz. Es una región, un sólo seguro de vida para el transporte, una sola tarifa, una sola legalidad que quita todas las ilegalidades, desnuda la coima y elimina la burocracia. La vagancia. El miedo.

La inflación, la droga, la violencia, el desamparo golpean igual en Sarmiento y Córdoba que en mitad de VGG o de San Lorenzo. Negar los hechos ya no es ignorancia o distracción, es insulto, es pecado, es sospecha de negociado. Si tenemos los mismos problemas, en qué cabeza cabe pensar que el transporte es cuestión de un boleto, un empresario, una ciudad, una pelea entre concejales. Por favor. Ganancia política. Ruindad en estado de máxima pureza.

"Boletos, pases y abonos". Un trazado realista donde participen activamente los intendentes de la Región Rosario, con sus problemas y sus propuestas. Una proyección por 30 años que abra las puertas a la tranquilidad de una programación y la limpieza de procedimientos. Concejales, presidentes de comunas, intendentes. Senadores, diputados. Colegas que desde Buenos Aires comentan nuestra situación. Todos nosotros. No hay ajenos ni afuera.

El núcleo del sur santafesino mas allá del predio de Bella Vista, de Puente Gallego, del "Hospital Evita", mas allá de los terrenos galvenses vendidos a Car Gill, de Sport Club Cañadense y el Helipuerto de los gremios portuarios. No es sano una intendencia, una concejalía y una empresa con reflejos diferentes. El núcleo del sur santafesino con la provincia participando activamente, con los riñones apretados y las cartas sobre la mesa. Exigiendo cumplimiento exacto al estado nacional sobre obra pública, créditos y habilitaciones.

Qué ciudad, que tren suburbano, que troncales, que troles, que estaciones, que vigilancia, que auditoria, que licitaciones, que garantías para que no se vayan sin pagar, que calles arruinadas por las vías, que administración, que policías. Qué integración de colectivos locales, taxis, remises, tranvías, troles, colectivos, interurbanos, aviones, qué futuro. El que no arregla todo ya no arregla nada y peor: trabaja para el atraso. En el atraso las coimas, las avivadas, la mala fe, la mala praxis. Una región violentada por la ceguera, la envidia, la mirada corta y flaca. Un ruego: mirar el largo mañana.