Ceferino Reato en La Vereda de Enfrente

-¿Hay alguna implicancia, alguna posibilidad más que implicancia,  que la marcha de ayer y la reivindicación del juez tenga, eso precisamente, una implicancia, un fin positivo, efectivo?

Yo creo que puede ser, porque fue una marcha numerosa. Además había magistrados importantes, fiscales importantes, asociaciones de jueces importantes, que ya también tuvieron su reunión con el presidente de la Corte, con Lorenzetti. Ellos, la idea es que Lorenzetti y sus colegas de la Corte se pongan al frente de la defensa de lo que ellos consideran jueces independientes que están siendo avasallados por el gobierno nacional. Y en ese sentido fijan muchas esperanzas, según dicen, en lo que pueda hacer la Corte. Porque además la Corte también puede ser víctima, según ellos, de las maniobras del gobierno. Creo que podemos llevarnos alguna sorpresa en los próximos días, con alguna acordada de la Corte. 

-Charlé con Julio Bárbaro, y me decía algo que yo ignoraba, que durante los años duros, este juez, que ahora fue sacado de manera tan indigna, era uno de los que representaba habeas corpus y peleaba junto con ellos. O sea que tiene un pasado progresista muy claro.

Es progresista, de la llamada izquierda nacional. Y Julio Bárbaro lo conoce muy bien. Y me parece que eso marca también el desgranamiento de la coalición oficialista, de la coalición kirchnerista, porque seguramente Cabral debe haber estado muy cerca, en algún momento, del kirchnerismo. También Víctor Ramos. Porque Cabral pertenecía al mismo espacio. Entonces lo ha recordado Ramos, que es súper kirchnerista. Y me parece que es una persona que tenía una cierta capacidad, reconocida por sus pares. Y también porque sus pares ven que esto no es sólo contra Cabral, sino que puede ser contra todo juez que no sea considerado confiable por el gobierno. Es esa ley de subrogancia, que le da al Concejo de la Magistratura, por simple mayoría, la posibilidad de nombrar y remover jueces subrogantes, sin necesidad de una mayoría especial de dos tercios en el Concejos para nombrar jueces. Pero con esto es como un atajo que se usa en caso de Cabral pero se puede usar en otros casos. Y de hecho, ya se ha usado en otros casos, en Bahía Blanca y demás, para el nombramiento, digamos, de un montón de jueces por un tiempo, tiempo necesario para determinadas causas que al gobierno le interesan.

-Vamos a seguir charlando, pero te pido por favor que no menciones para nada una posible suma del dólar, porque me parece que hay una ley que nos cabría a los dos si hacemos mención a una corrida bancaria o a que compremos dólares porque mañana pueden estar más caros.

No, no hay que decirlo. Hay que hacerlo. Como hacen algunos kirchnerista, que dicen “no compren dólares” y después resulta que tienen un montón de dólares en su casa. Ahora, compran barato, porque después compran casas y a buenos precios, ¿no?

-En Pilar es un buen lugar para que compremos, porque al parecer está todo baratísimo.

Está todo barato. Increíble, pero que bien. Hay que seguir en lo que hacen y no en lo que dicen.

-Exactamente. Había una vieja frase de Kirchner, que decía: “No crean en lo que digo, vean lo que hago”.

Yo creo que tenía razón.

-¿Estás viniendo el viernes a Rosario a acompañarme en la presentación del libro?

Sí, ese libro. Me gusta mucho el estilo. Porque en poco se dicen muchas cosas. Son esas  frases cortas y oraciones cortas, pero llenas de sentido. Está muy bueno el libro. Te felicito.

-Te espero. Conocés el sitio, porque el sábado vas a estar como invitado de Oscar Cecini en “Los Notables” y a las 7 de la tarde del viernes acompañándome con el libro. El viernes te espero por acá. Pero te cuento una anécdota. Tengo un amigo que vive naturalmente en Madrid, y por razones de trabajo está acá doce días; y le dije: “tomá, llévate esto, léelo tranquilo, vas a entender lo que nos pasó”. Vos estabas en Brasil y él estaba en Madrid, se fue en el 90. Le digo: “vas a entender lo que nos pasó en el 2001”. Y a la mañana siguiente vino y me insultó. Me dijo: “sos un hijo de puta. No pude dormir, seguí leyéndolo hasta que me dormí”. Estoy hablando de Doce noches.

Qué bueno. Me alegra escuchar eso. Lo siento por él.

-Sucede, porque cuando aparece un libro como el tuyo, en donde se va hilvanando sin que se note el hilván, todo lo que nos sucedió con cada uno de los personajes, sucede eso: te entusiasma. Una pregunta, apoyándome en tu conocimiento de nuestra realidad política y de ese libro: ¿sirven para algo lo vicepresidentes? ¿Servirá para algo el comisario político en la presidencia de Scioli?

Yo creo que el Presidente tiene tanto poder. Después de la crisis ha adquirido más poder aún del que tenía antes. Creo que Scioli lo puede neutralizar fácilmente, pero para eso va a necesitar la alianza con los gobernadores justicialista, que le permitirían un control del Senado, y nombrar un jefe de bloque afín. Pero el vicepresidente está pintado. Yo creo que lo que pasa con Boudou es bastante indicativo. El tipo, digamos, está knockout pero no se nota institucionalmente porque le rol del vicepresidente está muy disminuido. Ahora, para hacer eso, Scioli tiene que tener voluntad y capacidad. Primero tiene que ganar las elecciones, ¿no?, pero suponete que gane, después para neutralizar a Zannini lo puede hacer perfectamente si él apuesta a eso y los sciolistas también, porque el presidente de nuestro país tiene muchísimo más poder que antes y el gobierno nacional, ni te cuento. Entonces, creo que puede hacerlo. Ahora, va a haber un costo, hay un conflicto ahí que algún costo va a tener. Y hay que ver quién lo paga, porque puede ser bastante fuerte ese conflicto.

-Yo creo que esto que me dijiste, que se tiene un primer general, juntarse con todos los otros gobernadores, que son los generales, es la base de lo que nos puede suceder.

Él apuesta a eso.