Google+ Raúl Acosta: Varela, los monos, la monja Pelloni y el maquillaje

sábado, 20 de septiembre de 2014

Varela, los monos, la monja Pelloni y el maquillaje

Carlos Varela* -Abogado- en La Mañana Entera


-Varela, acá hay una serie de entredichos en los que me gustaría escuchar tu versión por varias razones. La primera: desconozco todo del tema jurídico, no soy periodista de tribunales, la hermana Pelloni vincula al abogado Varela con cuestiones cercanas al gobierno. Cuando habla de un paquete mafioso te pone dentro, y por lo que yo sé vos has estado enfrentado con el gobierno, tu defensa de Los Monos, de un montón de gente de avería que ha tenido conflicto con el gobierno te ha puesto como abogado defensor de ellos contra el gobierno. Yo no te hacía aliado del gobierno. ¿Está equivocada la hermana Pelloni?

Sí, está equivocada. Incluso, si hacés un análisis más profundo, perjudica a la línea defensiva de Montenegro o la lesiona. Porque por un lado la hermana Pelloni dice que ella con su organismo viene a defender a la señora Montenegro y que cree en todos sus dichos y afirmaciones. Y por otro lado, en el mismo discurso de Pelloni, mete la pata de una manera tan grosera diciendo que yo soy socio de Superti, amigo de Binner, íntimo amigo del gobierno y asesor. Es un dato tan erróneo que cualquier persona de la zona sabe que eso no es cierto. Lo que pasa es que en discurso de Pelloni, quien discuta eso piensa que si mete la pata, ya sea por un error o con intención, en el tema de Varela también puede ser lo mismo con Montenegro. Y si erra en un lado puede errar en el otro. Ese es el flaco favor que le hace a Montenegro al hacer una afirmación tan imprudente, tan errónea como la que hizo, quizás guiándose por algún asesor trasnochado que le acompaño algunos papeles equivocados.

-A mí me parece que es ese error de mucha gente de siempre usar los infinitivos, los absolutos, siempre, nunca, jamás. Uno que está acostumbrado a la vida sabe que los infinitivos no son los mejor para la sociedad. Siempre hay cosas parciales. Una de ellas, la que te escuché con el colega Maggi y me pareció muy atinado lo que planteabas: una de ellas es el sujeto de esta controversia, el sujeto son los pibes desaparecidos.


Exactamente. Todo lo otro son cuestiones colaterales.

-Claro, pero los pibes -para fijar una fecha arbitraria pero posible-, el 15 de julio nacidos vivos o muertos estos pibes ya no estaban en la consideración de la sociedad. ¿Cómo se puede -Zavalla, Casilda, Pujato, Granadero Baigorria- con la policía en la zona, con gendarmería dando vueltas, hacer desaparecer dos pibes? Porque hay algo imposible de quitar: esta mujer, por las hormonas, estuvo embarazada.

Estuvo embarazada. La pericia médica arrojó el resultado positivo. Pasemos a lo siguiente.

-Lo que te pregunto es esto: ¿ha habido algún adelanto?, ¿ha habido negligencia policial, jurídica, de las autoridades administrativas provinciales? ¿Qué es lo que considerás vos?

Yo considero que el inicio de la investigación debió profundizarse por otros lados. Es decir, hubo una demora importante en la investigación. Debieron haberse extremado las líneas investigativas en relación a asuntos asistenciales, como brindaba los datos Montenegro, dentro de las limitaciones que tienen por su nula información. Haberse ocupado más de eso. También entiendo que en términos aparentes las personas involucradas en una sociedad muy chica, como lo es un pueblo...

-Te interrumpo. En un pueblo vos sabés hasta quien hace trampa en las bochas.

Exactamente. Porque además hay una mezcla de clases en los pueblos. Con lo cual debió profundizarse llamar a testigos, y profundizar en la misma Casilda o Zavalla, de la zona, averiguando si este era un hecho sistemático, un hecho aleatorio o uno más de una conducta sistemática. Que es lo que de algún modo se intentó plantear ahora.

-Ayer charlé con el Presidente comunal de Zavalla, Mujica, y lo primero que hice fue preguntarle qué sabía él. Y me dice que él fue uno de los primeros que denunció, porque la señora Montenegro vive ahí todavía, la atendía asistencia que daba presidencia comunal, después se peleó y que él hizo la denuncia correspondiente por la desaparición de los bebés. Y yo le hice dos preguntas jodidas, la primera si tenía información sobre que esta señora estaba vendiendo los bebés; y él me dijo que no tenía ningún dato de esto, pero esa pregunta está dando vueltas.

Ella no me refiere nada de eso. Te aclaro. Es más, yo hablé de ello y se lo pregunté, para tener un panorama claro de lo que aconteció. Y llega lo negó. Sí dijo que iba a haber una entrega directa respecto de uno de los dos matrimonios para una adopción pero no por tema de dinero. Y ella hace referencia a que de vez en cuando le dejaban plata por necesidades económicas de ella, pero no por una operación de compra-venta. Eso es todo lo que me indicó, y que después pasa por que pasa, desaparecen los bebés al momento de nacer.

-Yo sobre eso dijo, nacidos vivos o nacidos muertos, pero los pibes no están y el eje sigue siendo ese. Pero hay dos cuestiones laterales que también tienen su incidencia. La primera que este hombre , Dante Binner tiene más de 80 años y más de 50 de médico en Casilda. Y el apellido que porta pone la cuestión de la señora Montenegro, que en los primeros dichos no lo mencionaba pero en los últimos evidentemente sí, y con abundancia, pone la cuestión en otro plano, en el plano del mentidero político, porque la verdad que no creo que Dante Binner sea candidato. Pero el apellido Binner pone esta cuestión en los medios nacionales.

El máximo exponente del socialismo en lo que es una candidatura a nivel del país.

-Eso, a tu tarea, ¿incomoda?

Sí, absolutamente. A mí siempre me molestó en el tema jurídico las cuestiones políticas. Siempre he estado en el otro lado del mostrador, con lo cual la cuestión política provocaba en las causas que yo he representado un desbaratamiento total de lo que es la lógica jurídica, porque –como dice aquella frase- cuando la política entra en la casa de la justicia, la justica salta por la ventana. Ahora estoy de un lado en el cual veo que es diferente, pero no en la misma situación en la cual las garantías individuales de una persona a la que yo represento se ven violadas por el avance de la política. Pero es lo mismo, porque en una cuestión política le es funcional a ambos bandos para utilizarlo para su propio progreso. En el caso particular, en el caso del gobierno nacional o en el gobierno central provincial, es decir, del kirchnerismo o el socialismo. Eso hace que se pierda la cuestión central, que es la averiguación de la verdad. Y la averiguación de la verdad real, como objetivo central en este caso, tiene el centro en los dos mellizos desaparecidos. Y acá se está hablando más de Binner cuando en realidad se tendría que estar hablando de los mellizos.

-Vos sabés que sobre eso tengo también mi íntima convicción: yo creo que no se puede, desde Corrientes y por teléfono, estar en autos de lo que pasó el 15 de julio, de lo que pasó en la zona de Zavalla, Pujato, Casilda y Granadero Baigorria.

Tengo una cosa que le dije alguna vez y se lo decía a mis amigos: motivá la irritación por el nombramiento burdo de varios nombres y con una falta total de prudencia de parte de la hermana Pelloni. Montenegro aparentemente es asistida, y todos se jactan de darle apoyo. El asunto es que Montenegro, si no hubiera sido por la intervención de dos demoníacos letrados, como mi socio y yo, no hubiera tenido ningún apoyo y esta causa hubiera naufragado por los recursos de apelación que nosotros propugnamos que se interpusieran, no se hubieran interpuesto. Lo que te quiero decir es que perdieron más tiempo maquillándose para salir en televisión desde Buenos Aires que en venir a Casilda a atender a Montenegro, porque a Casilda para hablar personalmente con ella no vino la señora Pelloni. Así que dejémonos de pavadas, de actuaciones, la máscara parece que transforma el rostro.

-¿Quién es tu socio?

Adrián Martínez.

-Hay otra cuestión, ya te diría que de análisis político-jurídico. Quiero saber qué es lo que pensás. A mí no me gustó Superti, lo que hizo. La reforma judicial. Pero esta hecha. Pero eso es lo que pienso personalmente.

Yo tengo un enfrentamiento desde hace un tiempo con Superti. Creo que es un excelente profesional, pero yo creo que tiene un montón de defectos y ahora le achacan uno más y es que es amigo mío.

-Pero digo esto para que se entienda que no hablo desde el afecto con Superti. Pero creo que arrancó, activaron una espoleta y arrancó una mecánica de la justicia en Santa Fe que no va a ser posible hacer retroceder fácilmente. Planteadas estas cuestiones así, esto del Ministerio de la Defensa Pública, ¿ayudaron a esta causa? ¿O con el viejo sistema judicial esto se resolvía más rápido?

En líneas generales yo coincido contigo. Voy a ser lo más generoso posible, despojarme de cualquier parcialidad. Yo no creo en la maldad de la gente, yo no creo que Superti haya entrado pensando en un plano en el fallo. Yo creo que tiene buenas intenciones, él ha creído que era el mejor. Creo que el sistema que se instaló adolece de fallas gravísimas porque no estamos preparados para un sistema de las características que se ha impuesto en la provincia de Santa Fe. Es para un país Europeo más que para solucionar problemas argentinos. Yo no creo que lo haya hecho ni por maldad, yo creo que ha tenido un objetivo positivo pero no creo que en el práctica se traduzca en buenos resultados. En el tema puntual, yo creo que hubiera sido mucho más posible hallar la verdad en el sistema anterior que en este, porque la policía no está conforme con este sistema. Me aparto un poco del tema.

-No te apartás, porque la próxima pregunta era si en esto no hay una especie de acto reflejo, no digo venganza, de una policía que dice “con esto nos están cagando”.

Exactamente. La policía no está conforme. Y muchas veces la policía sabe qué botones apretar para ir a fondo en una causa o sabe qué botono no apretar para que todo naufrague. Y en el sistema anterior la policía era más reconocida, tenía más injerencia en una investigación. Ahora resulta que está comandada por gente demasiado joven, carente de experiencia, no digo que no sean capaces pero carentes de experiencia.

-La pregunta siguiente es: patrocinio, ¿no te sacarán el patrocinio? Porque acá a lo mejor hay gente que tiene una intención distinta a la tuya y la intención política va por un costado que no es el tuyo, y me parece fenomenal. ¿No te querrán sacar el patrocinio?

Fíjate que desde que entró mi nombre… El miércoles sale la nota en La Capital, aparece mi nombre el sábado, cuando aparece mi nombre el miércoles, que es lo que provoca la apelación de las dos primeras horas del día jueves, obviamente que eso molestó a todos, ¿por qué? Porque el Ministerio Público tenía decidido no apelar. Más vale que seguramente habrá alguno que me quiera sacar, ya sea de un lado o de otro. Lo que sí yo le dije a Liliana Montenegro es que cuando vos estés amparada por algún estudio de abogados, nosotros nos vamos. Es decir, mientras nosotros vemos que vos estás amparada, nosotros nos vamos. Es decir que si nos sacan el patrocinio y Liliana Montenegro está protegida nos vamos con la satisfacción del deber cumplido.

-Dos reflexiones. La primera: yo creo, conociendo íntimamente los pueblos, que algún cana sabe lo que pasó.

Coincido también. Por eso te digo, cuando hablábamos del sistema nuevo y sistema viejo. En el sistema viejo había una idea más corporativa de la fuerza de seguridad, donde se preocupaban por descubrir la verdad. Ahora parece que los triunfos y los resultados positivos de una investigación son transferidos a otros organismos. Y eso a la policía le jode. Y por ahí provoca una actitud, diría, zonza.

-La otra es estrictamente personal y a tu esternón: Carlos Varela no es un nombre, es un peso pesado. ¿Está claro lo que digo? Yo vengo viendo pesos pesados desde que Agustín Rodríguez Araya se paraba en los escalones, puteaba a un juez… Ahora, esto y el haber sido abogado de causas como la de Los Monos, me hace que me pregunte cómo es posible que Varela, que es un peso pesado, que defiende narcotraficantes esté con esa mina gratis y por qué.

Porque, yo creo que me lo vas saber entender, porque todos somos diablo y Dios al mismo tiempo, y en esta fuimos Dios. Nada más que eso. Alguna veces hacemos cosas criticables, a veces tenemos conductas que pueden ser motivo de alago. Todos somos Dios y el Diablo, uno no es una sola persona. Y en esta nos tocó estar del lado, lo digo con alguna ironía, de los buenos. Nada más que eso.

*Carlos Varela es abogado, actualmente representa a Liliana Montenegro, la mujer que denunció el robo de sus mellizos recién nacidos en Zavalla.

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