El número mágico en Rosario es el 4
Con sus apellidos identificatorios estos son los concejales rosarigasinos que, en esta semana que arranca el domingo 3 de diciembre, deciden el futuro de la ciudad desde su banca, con sus alianzas, sus acuerdos y sus veleidades. Salvo error u omisión.
Son 9 bancas del PRO Cambiemos. Roselló. Bouza. Chumpitaz. Cardozo. Roy López Molina. Anita Martínez. Ghilotti. Agapito Blanco y Figueroa Casas. Será necesario volver sobre estos muchachos. Los une un detalle. No hay “ancianidad”.
El peronismo suma 7 bancas, con diversos sectores, líos, sumisiones y desconciertos: Sukerman. Norma López. Andréz Giménez. Toniolli. Magnani. Gigliani. Miatello. Los orígenes diferentes no los entusiasma. Disimulan. Cargos, comisiones y la vicepresidencia son parte del sueño de muchos con fracasos a cuestas, como Sukerman y sus intendencias fallidas, de sueños revolucionarios en la camiseta, como Toniolli, y de clara pertenencia al orden, la eficiencia y la burocracia mansa, como Miatello.
El deshilachado FPCyS suma otros 7 concejales. Javkin. Poy (el de la palomita canalla). Zeno. Schmuck. Irízar. Estévez. Ghirardi. Algunos, como Ghirardi han sido multi función municipal y provincial. Otros fueron “ ninguneados” como la radical Schmuck, antes aliada de Javkin, luego traicionada por este y ahora nuevamente juntos. Otros, como Poy y Zeno se sostiene que provienen del PDP. Creer que la democracia progresista es (aún) un partido de peso, de votos, es creer no en la democracia sino en la ciencia ficción. Hay algo de eso. Los dos que están presentes llegaron por otras razones cercanas al afecto de la sociedad y no a su trabajo partidario.
Los chicos de “Giros”, devenidos en Ciudad Futura tenían tres y sumaron uno mas: 4. Estaba Juan Monteverde. Su señora esposa, Caren Tepp. Uno de los hermanos Salinas (los dos militan en la franja a la izquierda del socialismo) y ahora sumaron un pastor: Trasante. Cuando eran una estudiantina rebelde sumaron 3. Ahora, dos años después, apenas uno: el pastor. Pertenecer trae sus problemas para la rebeldía del anarquismo ciudadano. Son parte del Gobierno. Municipal.
Por fuera de cualquier emplazamiento queda una banca: Celeste Leprati. Es la que porta el apellido de “el Ángel de la bicicleta”, como reza la canción de León Giego: Angel Leprati, asesinado por balas policiales hace algunos años. Rótulo partidario: Frente Social y Popular.
Respirador artificial
Estamos asistiendo, en este diciembre de 2017, a la parte de final de una parábola que comenzara con la renuncia de Usandizaga, la caída del peronismo a quien Rosario le negó la intendencia (traiciones entre Venesia y Joaquín) la llegada de Héctor Cavallero, la persistencia de Hermes Binner por sobre el histórico referente: Guillermo Estévez Boero y un crecimiento, con el paraguas de Binner, que cesó hace tiempo. Hoy es el otro costado de ése semicírculo, la otra punta del arco iris. Sin la tinaja de doblones, claro está. El número mágico es 4. Y el sueño que Lifschitz desde ahora y hasta junio/julio de 2019, pegue un golpe de timón y salve la ciudad. Al menos eso. Hoy, por hoy, el socialismo es franca minoría en el Concejo de Rosario y la intendencia ( la señora Mónica Fein) debe negociar todo con bloques que no son absolutamente amigos, en algunos casos nada. Se insiste: el número mágico es 4. El socialismo esta con el respirador artificial.
El claroscuro del PRO Cambiemos
La intendencia sabe que la Presidencia del Concejo es del PRO Cambiemos. Que no será Roy López Molina (tiene votos, debe opinar sobre provincia y nación con las manos sueltas y las espaldas tranquilas) que tampoco será de Chumpitaz ( que también tiene sus votos) y que la simpatía no alcanza para que sea Anita Martínez. Se notaría su inexperiencia y sus distracciones a la hora de declarar. Todos los boletos los tiene comprados Roselló. El operador de todos los arreglos, por su experiencia, es Carlos Cardozo, dentro del grupo, pero “Fede” Angelini tiene opinión. Alejandra Vucasovich aún triene opinión. Buenos Aires tiene opinión (y mucha).
No se puede seguir sin dejar en claro un punto. La renuncia a la banca nacional de Anita Martínez pone en el cargo, por simple secuencia de la boleta, a la señora Astrid Hummel, de clarísimas relaciones con muchos empresarios, algunos excesivamente mediáticos, o directamente empresarios mediáticos. Su firma en el INAES, donde fue nombrada por el gobierno nacional, para la autorización de “los numéricos” de todas las provincias (por créditos que se cobran con la puntualidad del sueldo del Estado) hace que su cargo sea importante, y de rigurosa confianza de quienes deben manejar la relación cooperativas, fundaciones, INAES /Gobierno Nacional. Es un punto que debe quedar en claro, pero aún está oscuro. Para que se entienda. Esos numéricos en la provincia, por años, estuvieron cera de alguien de confianza del mitológico Alberto Maguid. Fácil de entender.
Vamos a a los bifes
El Socialismo, que le jura amor a cada una de las siete individualidades que forman su grupo, quiere la vicepresidencia (por cantidad de votos en octubre de 2017 no les toca, les tocaría a los peronistas) pero se conformaría, si debe resignarla, por conservar lo que es verdaderamente el riñón de esta nota: el número mágico. El 4. En cada comisión del Concejo hay siete miembros. El socialismo quiere tener 4 votos en Gobierno, Presupuesto, Obra Pública, Planeamiento. Sin ése número no tiene quórum la señora Fein y debe negociar todo. Según los votos de octubre de 2017 no lo merecen. Está en juego un segundo cargo en el directorio del Banco Municipal (el PRO Cambiemos ya tiene un miembro) y lo que va desde “el habilitado” al Jefe de la seguridad, la maestranza, la mayordomía y las finanzas. Y la `preparatoria para otro directorio del Banco sobre el 2019.
Una limosnita de 4 votos, por el amor de Dios. Eso pide el socialismo. Falta saber qué entrega a cambio. El emprendimiento inmobiliario que concilia a Enapro. MOP. Servicios Portuarios. Smith (CGT) Torres Maui (De Vido). Amarraderos y departamentos sobre el río. Zona Franca Boliviana. Los 19 monobloques en el ex Regimiento 21. Contrato de la basura (con un familiar presidencial) contratos de Transportes. Contratos de estacionamiento medido donde reaparecen nombres con historia, como los herederos de Sergi y sus socios. Todo en superficie.
El socialismo sabe que ha perdido. Que le quedan como fortaleza todas las categorías altas (son socialistas la mayoría de los “Jota23” de la municipalidad) pero que hay dos años en que la Fein marcha hacia el desierto y el Pro hacia la intendencia. Tiene una sola alianza posible: Con el peronismo K. Y un solo timbre: Balcarce 50. Y tamnién un solo dedo índice para tocarlo: Miguel Lifschitz. Já.
El problema del socialismo en Rosario no es Roselló (ya sabe que debe y puede hacer como presidente de ése cuerpo) el problema es la retirada. Y que le dejen el número mágico (4) para llegar a fin de este año, y del otro año. Y del otro. Parece demasiado.
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